miércoles, 17 de abril de 2013

Sobre la marcha republicana del pasado día 13 en Donostia


El pasado día 13, Ezker Anitza-IU junto con otros colectivos republicanos gipuzkoanos, nos manifestamos por las calles donostiarras por motivo del aniversario de la proclamación de la II República.

Los más de cien participantes de la marcha lo hicimos recordando que la llegada de la República supuso la instauración de un sistema democrático y parlamentario, con reconocimiento de la libertad ideológica y de pensamiento. Un sistema que instauró el sufragio universal, con el consiguiente derecho de voto a las mujeres por primera vez en la historia de España, reconociendo por primera vez en nuestro país la igualdad entre hombres y mujeres, que renunció a la guerra como instrumento de política internacional, que consolidó la educación y la sanidad públicas y globales, que separó Iglesia y Estado, un sistema que reconoció la libertad de conciencia, la libertad de culto, la libertad de prensa y la libertad de expresión y un sin fin de avances sociales; en definitiva, un sistema, que supuso el mayor progreso político y social en toda la historia española.

Pero no todo es mirar al pasado, porque los republicanos no nos conformamos con añorar los grandes avances de la II República, si no que trabajamos por la instauración de una Tercera República que acabe con esta monarquía, vestigio institucional del Franquismo. Un sistema, la monarquía, que es incapaz a todas luces de resolver los problemas de la gente de este país y que ahonda en varios de los vicios del sistema (corrupción, clientelismo, uso del Estado para beneficio propio “legal”…).

Por todo ello, también nos manifestamos para defender un nuevo proyecto constituyente que dé paso a un nuevo proyecto de país, de la construcción de un nuevo sistema constitucional, en el que el soberano -el pueblo- le otorgue legitimidad las nuevas instituciones del nuevo Estado Republicano. Un estado que democratice la economía y la vida pública, con un sistema electoral justo, con medidas de regeneración de la vida democrática y contra la corrupción, fomentando la participación directa de los ciudadanos en un Estado federal, laico y solidario.


Por la Democracia, la Libertad y la Justicia Social.
Gora Errepublika!
¡Viva la República!

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